top of page

Desconectarse


¡No les puedo explicar lo cansada que estoy! De verdad, por salud mental y darme un descanso, pensé en no escribir hoy. He tenido una semana larga y complicada en la oficina y esto me ha dejado mentalmente agotada. Cuando ya estaba a punto de ceder antes mis instintos de pereza y ocio, recordé que nunca he dejado de escribir en 6 años, y que muchas veces estos escritos han servido como terapia y psicólogo personal. Así que después de todo mi cansancio, decidí hacerle frente a mi inseparable compañero de los viernes. Después de todo, no existe viernes sin Nicole.


Hoy, por falta de tiempo y cansancio, no había pensando sobre qué escribir. Temprano en la mañana solicité ayuda a mis lectores para que me colaboraran con algún tema para escribir hoy. TODOS me parecieron fantásticos y los voy a escribir, pero si los escribía hoy, no les dedicaría el tiempo ni el compromiso que los mismos se merecen. Sin embargo, hoy les hablaré de algo concreto y corto: la desconexión.




Dicen que casi todo vuelve a funcionar si lo desconectamos un momento, incluso nosotros. Y es verdad, cada uno de los utensilios o elementos que nosotros usamos a diario, si lo apagamos después de un tiempo de utilizarlo, vuelve a encender. Y después de ese pequeño, pero necesario descanso, vuelve, incluso, mejor que antes. Este es un principio que aplicamos a todo lo que utilizamos, menos a nosotros mismos.


Nuestro cuerpo es nuestro utensilio más necesario. Es gracias a este que nos movemos y logramos completar nuestras tareas diarias. Pero así como los aparatos electrónicos, se comienzan a poner lentos cuando están saturados, de la misma manera nuestro cuerpo comienza a lanzar alertas de fatiga y nunca le tenemos las mismas consideraciones que a los aparatos. Forzamos nuestra mente, nuestro cuerpo y nuestro espíritu a niveles exhaustivos, sin darles nunca un pequeño descanso. Así que, claro, un día amanecemos con todo trabado porque no tomamos en cuenta las señales.


Practicado lo que escribo, desde hoy hasta el lunes me voy a desconectar de todo para volver a conectar. Claro, escribí este viernes más de allá que de acá. Tomándome una siesta de “15 minutos” que se convirtió en una de un poquito más de una hora. Mi cuerpo y mi cabeza realmente lo necesitan. Hay que desconectarse de todo, porque descansar es necesario para llevar una vida sana. Sé que este no es el mejor Viernes de Nicole que han leído, pero prometo regresar la otra semana mucho más conectada.


¡Feliz Viernes! 😊







0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page