Antes de tener la columna de “El Viernes de Nicole”, siempre me pregunté cómo era eso de tener un blog. Miraba a una amiga de la infancia, a la cual le tengo mucho cariño y a pesar de que no nos veamos ni platiquemos, la veo ser un verdadero éxito con su blog. Nunca entendí cómo funcionaba, ni como lo hacía, pero lo que si percibía era que lo hacía muy bien. Al ya tener “mi columna” el año pasado, mucha gente me sugirió el tener un blog. Me resistí bastante tiempo a la idea, siempre estaba el temor de si a la gente le iba a gustar y la verdad, no sabía cómo funcionaba. Me parece que era más el miedo de sentirme algo torpe en la tecnología. Comencé por distintas redes sociales a seguir a varios”bloggers”. Observaba sus perfiles, veía sus fotos y la verdad quedaba realmente perpleja ante lo que presentaban al mundo. Veía todos estos blogs publicitados y magistralmente elaborados y yo decía en mis adentros: “Nicole, vos ni con las esferas te sacas una foto así”.
Después de un largo proceso, mi hermano me ayudó a crear un blog. Tengo oficialmente un mes de tener mi blog “El Viernes de Nicole” en wordpress. Les confieso que ha sido toda una aventura. A
diario me encuentro en un constante reto, a decir verdad, muy hermoso, ya que a diario miles de personas en el mundo publican sus sentimientos, experiencias, ideas, opiniones, etc. Todos los días me impresiono con el talento y el valor que tienen las personas al compartir retazos de su vida. He llegado a pensar: “estas personas se han de aturdir con mis imágenes fuera de foco, mis párrafos inconclusos y mis extensos Viernes”.
Realmente, para ser de la generación llamada “Millenial”, me quede bastante atrás o como diría mi abuelo “el agua bendita no te llegó”. Se me dificulta muchísimo saber que tengo que alimentar cada una de las redes sociales donde promociono el blog, no solo por escasez de tiempo, pero porque después de ver las imágenes o promociones del resto me quedó paralizada. Me encanta poder ver los otros blogs, descubrir diferentes mundos en cada uno de los que visito y así poder adquirir cierta inspiración. Trato de hacer el mío más vistoso pidiendo la colaboración de mis hermanos o algunos de mis compañeros de trabajo, pero siempre resultan en risas y al final, no concretamos nada, más que las buenas carcajadas.
Lugar al que voy, cosa que veo, cosa que me como, lo veo ya como un elemento para el blog. Vivo, sueño y respiro el blog. Mi admiración para las personas que lo hacen tan magistralmente y resultan ser tan inspiradoras para gente como yo. Nunca pensé que tener un blog fuera tan duro. No crean que se los digo como queja, lo digo a carcajadas, ya que yo pensaba que tenía todo listo con el simple hecho de tener mi columna semanal. No, esta es una labor diaria y debo decir que me encanta. Nunca supe lo que costaba un “me gusta” y no digamos un tan añorado comentario. Creo que nunca le había agradecido tanto a Dios por todas las personas que tengo cerca que escuchan mis ideas locas, me aconsejan y responden a cada una de mis interrogantes. Este método es una gran enseñanza. Todos los días el mundo nos ofrece algo nuevo que aprender. Todos los días algo cambia y están todas las herramientas para que nos actualicemos. Es una verdadera escuela de persistir, resistir y nunca desistir. A diario tengo una expectativa de lo que encontraré y aprenderé, después de tanto resistirme al blog, por fin supe porque la gente me lo aconsejaba tanto, realmente es un mundo encantador. Al ver a toda esta gente realmente inspiradora llegar a la vida de miles de personas, no puedo nada más que aspirar a trabajar arduamente y con felicidad en mi tan amado “Viernes de Nicole”. ¡Feliz Viernes! 😊
