top of page

9 años después…

Yo recuerdo que hace unos cuantos años escribí un Viernes de Nicole con enojo y decepción porque me habían quitado mis vacaciones en el trabajo. Era tan largo “el castigo” que el primer periodo de vacaciones no cubría todo lo que debía pagar. Así que debía trabajar en julio y en diciembre los respectivos días. Recuerdo haber estado tan enojada y frustrada al escribir. Yo no era una mala empleada y me estaban castigando por pura calumnia. Cité frases famosas de Facundo Cabral que describía a las personas a las que les dedicaba ese viernes (los pendejos). Y aunque una buena parte del escrito era un desahogo para mi, una parte mucho más grande quería que llegara a las personas que habían retirado mis privilegios y las confianzas de las cuales gozaba. Después de ese escrito, mucho en mi cambió laboralmente. Siempre había pensado que me habían “quitado” tanto, hasta ayer. 


Pensé en esto, no porque no tenga en qué pensar y esté aburrida. Pero ayer mientras, voluntariamente, me encontraba trabajando durante el periodo de vacaciones, con alegría y vocación, me di cuenta de todo lo que ha pasado desde ese tan enojado Viernes de Nicole. 


Me encontraba limpiando mi escritorio y buscando una serie de documentos para iniciar un proceso nuevo en mi vida y me encontré con nueve años de vida entre esas gavetas. Por un momento dejé de buscar y presté atención a cada cosa que encontraba. Cada hoja, cada papelito, cada expediente que encontraba me iba recordando a una Nicole diferente. Iba abriendo puertas a cosas que habían sucedido y ya ni me acordaba. Era sorprendente ver algo y transportarme al momento exacto en el que sucedió. 


Por aquí he expresado tantas veces mi tan añorado deseo de salir corriendo del MP y nunca más volver; pero ayer, entre recuerdos buenos y malos, me di cuenta de la labor transformadora que estos 9 años han hecho en mi. Ver mi salida definitiva del lugar que ha sido mi constante, no ha sido fácil. Y no es que sea fácil o difícil, es que a veces pesan más los buenos recuerdos que todo lo malo que pudo pasar, porque: ¡WOW! ¡Como han habido cosas malas! Pero las buenas que han habido, son tan grandes que amortiguan todo lo malo. Yo nunca creí decir o pensar, que cerrar este capítulo de mi vida me fuera a pegar tan duro.  


Pero la vida es de cambios y es de transformación. Es de dejar ir y fluir para serle útil a Dios en donde sea que te necesite. Y ayer entendí eso. Ayer en esa búsqueda para mi futuro, Dios me mostró lo que el MP había hecho por mi. No solo me formó y capacitó en áreas del derecho que jamás pensé ejercer, pero me dio fortaleza y sensibilidad; y mi vocación de servicio, creció exponencialmente al 1000 por ciento. Fue aquí donde se me permitió ayudar a los niños de esa área. Aquí también conocí la amistad y la lealtad. Fue aquí donde le hablé de la Virgen a una de las personas que más quiero y que aunque no quería y no creía, hoy es una gran devota. 


Yo no entendí por qué nunca en estos 9 años surgió algo diferente en mi vida laboral. Porque por más que me quería ir y le pedía a Dios que abriera un camino, no se concretaba nada. Entendí que no estaba lista. Que tenía que pasar por cada uno de los procesos que he pasado para pararme firme donde estoy hoy. La Nicole de hace 9 años, sin una vida en el MP, no sería capaz de enfrentar los desafíos que se vienen hoy. Es capaz que la Nicole que hoy escribe estos blogs, no existiría. Porque para bien o para mal, el Viernes de Nicole surgió en medio de una de las tantas crisis que tuve en el MP. 


A veces podes encontrarte frustrado donde estás. No entender por qué las situaciones no son justas. Por qué por más que te esforzas las cosas no parecen cambiar. Y hoy te digo: esperá, aprendé, viví ESE momento y llenate de paciencia porque la vida te está capacitando para que podas servirle de mejor manera a Dios. No siempre es fácil. Bueno, nunca lo es. Pero un tiempo después vas a ver atrás y vas a dar gracias por ese fuego que aunque sentías que te consumía, te forjó. Esa prueba que te hizo más resiliente. 


Decir adiós nunca es fácil. Pero hoy, entregando mis vacaciones de manera voluntaria, quito todo lo no tan bueno que viví durante estos 9 años. Hoy no hay indirectas para nadie en este Viernes de Nicole, solo gratitud para cada una de las personas que se cruzaron por mi camino, para bien o para mal. Si estás donde ya no queres estar, deja que fluya. En el momento indicado VA A PASAR. 


¡Feliz Viernes! 😊



1 comentario

Entradas Recientes

Ver todo

Mama…

bottom of page